La República de Guinea Bissau, situada al noroeste de África, está limitada al norte por Senegal y al este y sur por Guinea. La componen nueve regiones: Bissau (capital del país), Bafata, Biombo, Cacheu, Gabú, Oio, Quinara y el Archipiélago de Bijagós.

La mayor parte del país es una llanura costera baja y pantanosa. El territorio se va elevando gradualmente hasta formar una zona con forma de meseta en el este. Se pueden distinguir tres zonas de vegetación: los pantanos y llanuras de la costa en los que crecen los manglares y las palmeras, una selva tropical en la llanura interior y la sabana arbolada del norte. Hay una gran variedad de aves acuáticas, incluidos el pelícano y el flamenco. Abundan también cocodrilos, serpientes, gacelas, monos, papagayos, hienas y leopardos.

El director de Filafinsa, Carlos de Figueiredo, durante su visita a las instalaciones del Correo de Guinea Bissau.

Quizá uno de los enclaves más interesantes del país sea el anteriormente mencionado Archipiélago de Bijagós, formado por pequeñas islas, entre ellas Bolama, Caravela, Carache, Formosa, Uno, Orango, Orangozinho, Bubaque y Rosa. Muchas de estas islas están desiertas y otras están habitadas sólo por pequeñas comunidades de pescadores. La isla de Bolama, antigua capital de Guinea Bissau, es la más cercana al continente y en ella hay excelentes playas. Otra bonita isla de este archipiélago es Bubaque, más urbanizada que la anterior, con bonitos palmerales, bosques y magníficas playas, siendo la más renombrada Praia Bruce.

Más de 20 tribus conforman la población del país, siendo los Balante, Fulani, Mandyako, Pepel y Malinké los grupos étnicos de más envergadura. El idioma oficial es el portugués, pero el criollo, una fusión de elementos portugueses y africanos, está muy extendido. En cuanto a la religión, cerca del 65% de la población sigue las creencias tradicionales, alrededor de un 30% son musulmanes y aproximadamente un 5% de la población es cristiana.

La agricultura es la base de la economía del país. El cultivo de alimentos incluye el arroz (alimento básico de la población), plátanos, maíz, yuca, mijo y alubias. En lo que respecta a cultivos comerciales, las principales exportaciones son de anacardos, cacahuetes y productos de las palmeras que crecen en las islas y la zona costera. La industria pesquera está creciendo muy rápidamente y es una de las principales fuentes de ingresos de divisas.

La historia más antigua de Guinea Bissau es poco conocida, aunque parece que algunos de los grandes grupos étnicos del país, como los balante y los pepel, se establecieron en el siglo XII.

Guinea Bissau es única en África Occidental. Su periodo colonial comenzó en 1456, unos 300 años antes que el resto de la región. Aquella época dejó una fuerte huella en el carácter actual del país. Tan significativo como el periodo fue el país colonizador, Portugal, pues la mayor parte del resto de la región estaba controlado por franceses y británicos.

Los portugueses comenzaron exportando oro y esclavos, pero incluso cuando estos «recursos» no pudieron explotarse más, Portugal se resistió a dejar escapar su colonia. Bajo el dominio directo de Portugal, el territorio pasó a formar parte de la Gobernación de las Islas de Cabo Verde hasta 1879, fecha en que fue configurada como colonia autónoma; sus fronteras con el África Occidental Francesa (que rodeaba el territorio de Guinea Bissau) fueron establecidas definitivamente en 1896.

En 1952, Guinea Bissau pasó a convertirse en provincia de ultramar y poco después apareció un movimiento nacionalista liderado por el Partido Africano para la Independencia de Guinea Bissau y las Islas de Cabo Verde (PAIGC) que, despues de varios incidentes, inició una guerra de independencia a principios de la década de los 60. El 10 de septiembre de 1974 Portugal dio oficialmente la independencia a Guinea Bissau.

En los últimos años el país trata de salir adelante tras haber sufrido varios golpes de estado y una guerra civil. En línea con esta recuperación, organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional, apoyan las reformas estructurales necesarias para impulsar la economía de un país que vive con optimismo el afianzamiento de su joven democracia.

Historia Postal

Como colonia autónoma portuguesa, Guinea Bissau había utilizado ya antes de 1880 los sellos de Cabo Verde, sin sobreimpresión, y desde 1880 hasta 1886 siguió haciendo uso de los mismos pero con la palabra Guiné sobreimpresa.

En 1886 apareció en el territorio la primera emisión regular que representaba al rey, que en aquel momento era Luis I de Portugal. Con el advenimiento al trono de Carlos I, sucesor del anterior, aparecieron dos series: una en 1893 y otra en 1898. Al proclamarse la república, tras el derrocamiento de Manuel II en 1910, esos mismos sellos fueron sobreimpresos con las palabras «República» o «República–Guiné».

Dichos sellos se estuvieron utilizando hasta la aparición de la serie de correo ordinario tipo «Ceres», ya introducida también en las demás colonias. En 1946 se emitió una serie conmemorativa dedicada al quinto centenario del descubrimiento del territorio a cargo de Tristán Núñez.

A partir de 1955 los sellos ostentan la inscripción de «República Portuguesa», al quedar la región estrechamente ligada a la metrópoli como provincia de ultramar.

Los primeros sellos postales de Guinea Bissau independiente se emitieron en 1975. A continuación aparecería una serie, repetida anualmente, dedicada a Amílcar Cabral, que encabezó el movimiento de liberación y fue asesinado pocos días antes de la proclamación de la independencia de Guinea Bissau.

Los sellos postales mostraban máscaras folklóricas (1976) y algunos ejemplares de la fauna que necesitan protección: antílope, fennec, serpentario e hipopótamo. Salvo la imagen de Cabral, repetida cada año, el tema de los animales era casi el único que hablaba del país. El resto, además de la celebración del censo de la población en 1979, se incluía en la lista conocida de los temas de siempre: olimpiadas y fútbol, pintura y premios Nobel, Lindbergh y Rowland Hill.

Las relaciones entre el Gobierno de Guinea Bissau y la empresa Afinsa Bienes Tangibles S.A., que comenzaron en el verano de 2000, tuvieron como resultado la firma de un contrato de partnership el 11 de octubre de ese mismo año, en este acuerdo, Afinsa asiste al Correo en las áreas de formación, necesidades informáticas, gestión de stock, etc., aunque la contribución al negocio filatélico es aún mayor. De hecho, empezando en el año 2001, Afinsa se encarga del programa de emisión de Guinea Bissau, desde su concepción hasta su diseño, producción, marketing y distribución mundial. De acuerdo con el Gobierno, la política de emisión de Guinea Bissau seguirá las más estrictas reglas éticas y deberá contribuir a crear un mayor y renovado interés en este país.


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